REFLEXIONES SOBRE EL ASESINATO DE BITA ROPE LAESA.
DOLOR Y TRISTEZA.
Después de unas semanas del asesinato de Bita Rope Laesa en un país africano a pesar de gozar del estatus de refugiado político en el mismo, tras las condenas y repulsa general que el crimen ha merecido; condenas a las que nos hemos sumado desde la Candidatura Independiente para la Presidencia de Guinea Ecuatorial, consideramos necesario e imprescindible efectuar una profunda reflexión sobre ese brutal asesinato
La primera de esas reflexiones debe girar obligatoriamente sobre la inseguridad de los refugiados políticos guineanos en particular y la oposición en el exterior en general. El tema no es baladí por cuanto, además de las alertas que se han venido reiterando al efecto, lo cierto es que no se han quedado solo en eso, en simples alertas. Ya se están convirtiendo desgraciadamente en una triste realidad.
La total impunidad con la que el régimen de Malabo es capaz de pisotear los convenios y tratados internacionales así otros compromisos. Es altamente preocupante, extraña y mucho, el silencio de los estados y las organizaciones internacionales llamados a tomar cartas en el asunto.
Esperamos en ese sentido que el ACNUR, abra una exhaustiva investigación sobre las circunstancias que rodearon el asesinato de Bita Rope Laesa, investigación en la que debería implicarse a fondo el gobierno costamarfileño. Ante este suceso, inquieta muchísimo conocer que Obiang Nguema tiene en su poder una lista de los opositores y sus familiares que se manifestaron ante la legación ecuatoguineana en Madrid. Nos gustaría que el gobierno español mostrara el mismo celo en aclarar este tema y otros que el rigor legal utilizado a la hora de revocar a D. Severo Moto el estatuto de asilo político.
La sombra del régimen de Malabo es desgraciadamente demasiado alargada, y ello debido a las mareantes sumas de dinero que maneja y con el que compra todas las voluntades; pues de otro modo no se entendería ese silencio concertado y cómplice de muchísimos gobiernos, organizaciones internacionales e incluso medios de comunicación.
Otra reflexión es la casi total normalidad con la que los pueblos de Guinea Ecuatorial afrontan estos casos. Obiang Nguema ya mató en su día a Pedro Motú Memiaga en aquel fatídico agosto de 1993 y no pasó absolutamente nada; después de otros asesinatos más, ahora acaba de segar la vida de Bita Rope y no se ha movido todavía ninguna hoja. Me resisto a pensar que en este caso se cumple aquel dicho de que “los pueblos tiene los gobernantes que se merecen”. Quiero pensar que los pueblos de Guinea Ecuatorial no se merecen esta dictadura continuada y sanguinaria que les pisotea y les oprime desde el acceso del país a la independencia hasta nuestros días.
Una vez mas, reiteramos a nuestros pueblos, a los ciudadanos que planten cara al dictador; ningún gobernante, dictador o no, ha podido contra todo un pueblo; precisamente por eso, rehuimos de fórmulas de acceso al poder por vías armadas. No nos gusta los llamados “salva patrias” toda vez que la factura que suelen pasar a los pueblos supuestamente liberados es muy costosa. El propio Obiang es el ejemplo paradigmático de lo que estamos diciendo. ¡Cómo y cuanto está costando la factura por el famoso golpe de la libertad del 3 de Agosto de 1979!
La dichosa factura que los pueblos de Guinea Ecuatorial están pagando a Obiang, a su familia, a los parientes y a la élite privilegiada que le apoya incondicionalmente y le jalea con fervor, tiene varios capítulos. La primera de las partidas lo constituyen las vidas humanas segadas directamente (suponiendo golpes de estado, muertes súbitas en accidentes fingidos, envenenamientos selectivos, terrorismo de estado en el exterior, desapariciones misteriosas.....) las muertes indirectas, causadas por (una mala sanidad ambiental y hospitalaria; desastres en transportes aéreos, marítimos y por carreteras, mala alimentación.......). el segundo capítulo o apartado de la factura, lo integra la explotación despiadada y sin control de los recursos naturales del país en beneficio único y exclusivo de los de siempre (petróleo, madera, pesca, diamantes,.....) otra partida de esa factura consta de la corrupción alentada desde la propia cúspide del poder, en ese sentido es habitual escuchar frases como estas. “La cabra come donde está atada”; o esta otra; “Obiang te ha puesto allí...... que más quieres”. La factura tiene muchas consecuencias terribles para los pueblos de Guinea Ecuatorial, obligados a pagarla:
La falta de principios de cohesión social, la invertebración del tejido social ecuatoguineano, el empobrecimiento general, la fragmentación de la ciudadanía entre una minoría muy privilegiada y una mayoría cada vez mas pobre, que amenaza con ser un detonante muy peligroso para convulsiones sociales en el futuro. ¡Pueblos de Guinea Ecuatorial! De vosotros depende el no seguir pagando semejante factura por el 3 de Agosto. No mas muertos como la de Bita Rope Laesa.
El emperador romano Calígula, sanguinario y famoso por su extrema crueldad, dijo lo siguiente “Que me odien con tal de que me teman”. En efecto, la filosofía de base de esta afirmación es la que hace suya el dictador Obiang Nguema que prefiere matar, extorsionar y amedrentar con tal de que le teman perfectamente así en el poder. La Candidatura Independiente quiere que rompáis esa cadena del temor, haciendo frente al dictador.
